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sábado, 17 de febrero de 2018

Málaga CF 1 - Valencia CF 2 | El efecto losa

Foto: Málaga CF
Lamento tener que contar otra derrota. Una más esta temporada. Pero me duele especialmente que en esta ocasión el final de partido fuera también cruel como lo fue ante Las Palmas en Gran Canaria. Aquí, en casa, ante nuestro público, cuando parecía que por fin podíamos llevarnos una pequeña alegría a la boca tras meses de penuria sufridas en La Rosaleda. El alborozo y las sonrisas se convirtieron en pena y lágrimas (literalmente). El Málaga CF sigue dando síntomas de equipo descendido, esta vez en la parte final del encuentro. Aunque hoy no mereció tal castigo.

Enfrente había otro de los equipos que copan el top 3 de la competición. Si la semana pasada se perdió de un modo muy perro ante el conjunto colchonero, hoy ocurrió lo propio ante el equipo ché un Valencia CF que vino a jugar a lo que mejor sabe, teniendo la pelota y confiando en su juego vertical con Guedes y Carlos Soler comandando las ocasiones de peligro más llamativas de los visitantes. No las tuvo claras en ningún momento, abusando en exceso del disparo lejano y sin apenas generar un peligro claro. Vamos, que el Málaga CF no se sentía incómodo en la situación en la que se encontraba.

Entonces apareció Ideye con su gol en el 27, estrenándose en la competición y llenando los corazones blaquiazules de un ligero optimismo ante tanta oscuridad. El Valencia sintió el tanto encajado como un golpetazo a sus aspiraciones tras ver que los locales no habían generado demasiado remate, pero esta vez sí parecía que la suerte esquiva con los blanquiazules por fin podía ser devuelta.

En la reanudación todo parecía igual desde el 1-0. El Málaga CF parecía adormilar al equipo de Marcelino y tomar las riendas incluso del encuentro. De hecho, ni Vietto ni Santi Mina olieron la pelota en otra demostración de táctica defensiva del conjunto de José González. Ni tan siquiera la baja a última hora de Ricca por unas molestias en los isquios debilitaron la línea de atrás con un buen encuentro cuajado por Diego González. Pero llegamos al minuto 60.

Primer mazazo que recibimos: una falta sacada por el costado derecho acaba en gol del hoy lateral izquierdo al fondo de las mallas. ¿Pero qué...? Lo anula el colegiado por una falta previa de En-Nesyri que parece sólo ver el trencilla. A partir de ahí, el equipo se vio ligeramente afectado. Por eso y por los cambios que el entrenador no llegó a atinar en las intenciones que buscaba: Keko no aportó nada tras sustituir a un recién estrenado Lestienne (buen encuentro del belga en su debut) y Lacen no se vio acertado los minutos que jugó por un Recio que acabó lesionado el encuentro. El resto es ya historia.

La historia que supuso ver cómo nos remontaban, primero en un córner cabeceado por Coquelin, y luego a los 5 minutos un penalti (claro) de Ignasi Miquel que acabó expulsado. Parejo se encargó de echar por tierra todas las esperanzas del equipo de la Costa del Sol. Tan solo hubo algo de emoción en la última jugada del partido donde el meta Roberto subió a cabecear una falta ¡que casi acaba en gol! Pero finalmente, otra losa pesada en forma de derrota que no hace más que hundir más y más al equipo.

LO MEJOR
- El debut de Lestienne. Se le notaron buenas maneras, pero condicionó su falta de ritmo.
- Iturra va a más y mientras el equipo tuvo presencia con el balón, el chileno actuó en todo momento con buen criterio con la bola.
- Ideye se estrenó como goleador. Además, remató casi todo lo que le llegó. Un auténtico killer del área.

LO PEOR
- Otro encuentro donde se pierde la oportunidad de puntuar con dos jugadas muy puntuales que el equipo, quizá por nervios o por el miedo a ganar, no supo leer.
- Los cambios de Keko y Lacen no aportaron nada y desordenó aún más al equipo.
- El gol anulado a Diego González es una canallada injustísima. Condcionó el resto del encuentro.

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