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| Foto: La Liga |
Y eso que el comienzo del encuentro no fue nada malo para los nuestros, que parecían un vendaval en el primer cuarto de hora con varias ocasiones desde el córner, con el Chory como asistente, y con llegadas peligrosas como las de Keko por la derecha. El Betis intentó soltarse del dominio malaguista, pero apenas llegó a puerta. De hecho, solo llegaría una vez en este primer tramo de partido. Y sería el del 0-1. Una jugada por banda derecha de Joaquín acaba con su asistencia al hueco a Sergio León que bate de tiro cruzado a Roberto.
El Málaga CF desapareció. En todos los aspectos. Ni reaccionó tras el gol y además la lesión de Adrián terminó por romper el centro del campo del equipo, colocando el mister a Chory en el mediocentro y sacando a un renqueante Diego Rolan al partido. Incluso pudo ser peor cuando el colegiado no dio por bueno un gol de Joaquín a un tiro de falta que el meta malaguista sacó a una mano, pero dentro de la portería.
En el segundo tiempo, nada más empezar prácticamente, Camarasa anotaría tras una buena jugada de toque del conjunto verdiblanco donde Barragán asistiría al centrocampista para que cabeceara a la red. El equipo, definitivamente, baja los brazos. Incapaz de romper la maraña defensiva bética, el Málaga CF abusó del pelotazo y del disparo lejano, que no le condujo a ningún lado y que tan solo hizo que el tramo final de partido fuera más cómodo para el rival.
Toca volver a empezar. De nuevo, las sensaciones del equipo son las peores. Pero no habrá tiempo de lamentarse teniendo al Alavés en tres días para cerrar este 2017 tan nefasto en la actual temporada.
LO MEJOR
- Los primeros 20 minutos del equipo, lo único destacable del Málaga CF.
LO PEOR
- El equipo, sin alma alguna tras encajar sendos goles.
- La lesión de Adrián en el peor momento posible.
- Rosales vio la quinta amarilla, se perderá el trascendental encuentro en Vitoria.
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